martes, 19 de enero de 2010

VVVVVV, análisis completo

Este fin de semana tuve ocasión de meterme a cuchillo con VVVVVV hasta conseguir terminarlo. Y lo conseguí, después de quemar unas 1050 vidas (si el muñeco del Bimbo que protagoniza el juego tiene un mínimo de conciencia de si mismo, tiene que estar mosqueado con el cosmos tela por tratarle así). De los 20 cristales a conseguir, llevo cogidos 16. Y los 4 que me faltan no es sencillo que los consiga, como luego contaré.

El mapa es bastante grande, quizá de unas 300-400 pantallas, aunque en realidad se puede viajar facilmente a cualquier zona usando los teletransportadores. Es más, en cualquier momento podemos regresar a la base y desde allí usar el teletransportador, por lo que una vez explorado todo el mapa y descubiertos los teletransportadores, viajar de una parte a otra del mapa es muy rápido. Como decía, aunque el mapa es muy amplio, debido a la velocidad de nuestro protagonista podemos llegar a cualquier parte en no más de 2 minutos.

Los cristales son más o menos fáciles de coger ... al menos los primeros. Los 10 primeros se cogen solos, por así decirlo. Sólo hay que ir descubriendo mapa y cogiéndolos cuando aparecen, haciendo alguna acrobacia con ascensores y teniendo algo de rapidez. Según cogemos cristales, se nos premia con melodías, que se pueden escuchar desde la base.

Por el camino nos encontramos ordenadores terminales, que al interactuar con ellos nos cuentan un pequeño fragmento del argumento. En general, su uso no es imprescindible, salvo algunos sitios donde tiene alguna implicación sobre la pantalla en la que estamos.

Hay posicionadores practicamente en todas las pantallas (y llegando al final, cada 2 o 3) que permiten grabar la partida continuamente. Aunque esto pueda parecer una ventaja (que en el 99% de las ocasiones realmente lo es) lo cierto es que en algunas partes es un problema, pues no queremos salir de la habitación en la que estamos, y si por si casualidad salimos y ya no podemos volver, la única forma de regresar es dejándonos matar, cosa que no ocurre tras pisar otro posicionador.

El juego posee varios puzzles curiosos. El primero curioso es una serie de pantallas consecutivas donde los extremos se unen, por lo que si uno sale por arriba aparece por abajo, y si sale por un lado, aparece por el otro. Estas habitaciones tienen una única salida, que al principio no sabemos, por lo que habrá que explorar todos los caminos. El segundo puzzle es una serie de habitaciones idénticas entre si, pero que en realidad son distintas, por lo que tirando de mapa (pulsando Intro) podremos ver donde estamos exactamente. El tercer puzzle nos lleva hasta habitaciones con caminos cerrados, donde la única forma de salir es usar pasadizos en forma de botón blanco brillante. Una vez usado el pasadizo, este desaparece. El cuarto puzzle, y el que más me ha gustado, es La Torre, que consiste en una trepidante fase en la que hay un scroll automático hacia arriba (como la tercera fase de Ghouls n Ghosts) pero con la dificultad extrema de que si tocamos el suelo o el techo, morimos automáticamente, cosa que ocurre con mucha asiduidad. Para colmo, hay una serie de cristales en The Tower, que para cogerlos hay que ejecutar varias acciones milimétricamente o nos pillará el suelo. El último puzzle consiste en aguantar entre dos líneas vibrantes durante 60 segundos, mientras por los laterales se nos lanzan cosas. Es decir, que no podemos detenernos, sino que estaremos 60 segundos rebotando, pudiendo unicamente ir a derecha e izquierda. Aguantar más de 5 segundos sin perder una vida es poco menos que imposible, con que 60 ...

Mientras estamos en The Tower, aparece la melodía insignia del juego, una canción llena de ritmo y de estilo épico que nos anima a seguir subiendo a toda velocidad. En la banda sonora original, incluso se incluye esta canción tocada al revés. Y como veréis, esto tiene mucho sentido en el juego por algo que ocurre al alcanzar la cima de la Torre.

Entre las cosas que le ponen a uno de los nervios hay dos cristales con los que uno piensa si el juego tiene trampras imposible. Uno es un cristal, que está en la parte inferior de una torre, justo a la derecha. Nosotros entramos por la izquierda, y la única forma de llegar a la derecha, ya que no podemos saltar, es dejarnos caer hacia arriba a lo largo de 5 pantallas verticales de pinchos y pasillos estrechos, llegar arriba, rebotar en una plataforma no-fija (por lo que ni podremos parar) y volver a caer por el pasillo de la derecha, volviendo a recorrer las 5 pantallas en sentido inverso. Como habréis adivinado, no existe ningún posicionador mientras tanto, ya que estamos todo el rato en el aire, así que hay que hacerlo de una tacada. Un servidor lleva perdidas unas 150 vidas en esta parte, y lo único que ha conseguido hasta ahora es llegar arriba, rebotar y caer 2 pantallas, por lo que aún me quedan 3 más.

Otro cristal medio imposible está en una de las pantallas que se comunican por los extremos. Hay un cristal donde hay que subir desde la plataforma inferior hasta la superior, superando 4 plataformas y mientras vienen enemigos por ambos lados, y encima están sincronizados. Yo he llegado a quedarme a medio palmo del cristal, pero aún no he conseguido cogerlo.

Una cosa buena es que al finalizar el juego, nos permiten continuar la partida y se nos comunica el emplazamiento de todos los cristales, para que podamos recoger los que vimos por el camino pero en ese momento no pudimos recoger.

También hay que contar que hay varios modos de juego más, como uno maníaco en el que sólo tienes ¡¡1 vida!! Con 1 vida he conseguido recorrer 12-14 pantallas. También existe la posibilidad de revivir los retos-puzzles tantas veces como uno quiera y practicar así su habilidad.

Y bueno, pues como veis el juego da para mucho. El domingo lo estuvimos jugando Cpcmaniaco, Jltursan, ZX4Ever, Robcfg, D-O-S, Abraxas y algunos más. Todos se quedaron más o menos sorprendidos de la rapidez con la que se desenvolvía el juego, y el más impresionado fue Jltursan, que dada su afición a programar juegos basados en Manic Miner, le hizo gracia ver que alguien programa juegos aún más difíciles que el suyo.

Una cosa curiosa de la OST es que la última canción es una canción tocada con guitarra dedicada al programador del juego, Terry Kavanagh.

Más adelante prometo poner fotos.

2 comentarios:

Josepzin dijo...

Probé el demo de este juego y me atrajo desde el primer momento, a ver si puedo dedicarle algo de tiempo.

PD: ¡Quita el captcha, que sólo sirve para molestar!

Lex Sparrow dijo...

Ya lo he quitado, pero como vuelvan los spammers ... ¡¡les daré tu dirección!!